

Tomar decisiones en el campo financiero demanda contar con herramientas que permitan evaluar con precisión la situación de una empresa. Los indicadores financieros son elementos clave que ayudan a analizar la liquidez, el endeudamiento, la rentabilidad y la eficiencia de una organización.
En el siguiente artículo, explicamos qué son los indicadores o ratios financieros, cuáles son los más importantes y de qué manera se calculan. Si te interesa comenzar una formación universitaria en este campo, puedes estudiar online la Carrera en Business Analytics de la Universidad Europea en Ecuador, si estás buscando especializarte en esta área, formarte con la Maestría en Finanzas te preparará para tomar decisiones estratégicas y dominar tecnologías de vanguardia.
Los indicadores financieros son cálculos matemáticos que se obtienen a partir de los datos contables de una empresa. Entre ellos están el balance de situación y la cuenta de resultados, que facilitan la toma de decisiones estratégicas al transformar esa información en métricas claras que evidencian la salud económica de la organización.
Directores financieros, controllers de gestión y analistas especializados usan estos indicadores para evaluar el bienestar económico de la empresa y, al tiempo, identificar áreas de mejora u oportunidades en la gestión de los recursos disponibles.
Cada indicador financiero brinda una perspectiva específica. Algunos de ellos se centran en su capacidad para generar beneficios, mientras que otros analizan su liquidez o grado de endeudamiento. Cuando se consideran estos indicadores en su totalidad, los expertos logran tener una visión completa del rendimiento económico y financiero de la organización.
Los indicadores financieros cumplen funciones fundamentales en la administración de cualquier organización:
A continuación, detallamos los principales indicadores financieros, los que todo profesional debe conocer, saber cómo se calculan y qué nos dicen sobre el rendimiento empresarial.
Son los que miden la capacidad de la empresa para generar beneficios a partir de sus recursos. Algunos ejemplos son:
Rentabilidad sobre los activos (ROA): este indicador financiero muestra qué tanto beneficio se ha generado por cada unidad de activo y se calcula de la siguiente manera:
Rentabilidad sobre el patrimonio (ROE): este indicador financiero mide la rentabilidad que se genera sobre los recursos propios disponibles, y que pueden incluir el capital social, las reservas, los beneficios acumulados y otros elementos del patrimonio neto. El ROE es una métrica fundamental en el objetivo de evaluar la capacidad de la empresa para generar valor a partir de los recursos con los que cuenta, independientemente de cuál sea su forma jurídica.
Margen de beneficio neto: este indicador muestra qué porcentaje de los ingresos se convierte en beneficio neto después de todos los gastos.
Estos evalúan la capacidad de la empresa para cumplir con sus obligaciones a corto plazo. Los más utilizados son:
Indicador de liquidez corriente: es el que mide la capacidad de la empresa para cubrir sus pasivos a corto plazo con sus activos a corto plazo.
Prueba ácida o indicador de liquidez inmediata: este indicador financiero es muy parecido al indicador de liquidez corriente, pero excluye los inventarios, ya que pueden no ser tan fácilmente convertibles en efectivo.
Son los que miden la capacidad de la empresa para cumplir con sus obligaciones a largo plazo. Los indicadores financieros clave en esta categoría son:
Indicador de endeudamiento (Deuda/Capital): este compara la deuda total de la empresa con sus fondos propios, que abarcan el capital aportado por los accionistas y las reservas acumuladas.
Ratio de cobertura de intereses: mide la capacidad de la empresa para pagar los intereses de su deuda con sus ganancias operativas.
Estos muestran cómo está utilizando la empresa sus recursos. Algunos ejemplos son:
Indicador de rotación de activos: es el que mide la eficiencia con la que los activos son utilizados para generar ingresos.
Indicador de rotación de inventarios: se encarga de evaluar la velocidad con la que la empresa vende y reemplaza sus inventarios.
Indicador de rotación de cuentas por cobrar: es el que mide la eficiencia en la gestión de las cuentas por cobrar.
Indicador de rotación de cuentas por pagar: complementa el anterior midiendo qué tan rápido la empresa paga a sus proveedores.
Los indicadores financieros son mucho más que números porque guían las decisiones estratégicas de una empresa. Bien sea para entender mejor la rentabilidad, la eficiencia o el endeudamiento, dominar estas métricas es fundamental para cualquier profesional de las finanzas.
Los profesionales que dominan la interpretación de estos indicadores y saben aplicarlos estratégicamente están mejor preparados para enfrentar los desafíos del mercado y aprovechar las oportunidades de crecimiento. La combinación de conocimientos financieros tradicionales con habilidades en análisis de datos y tecnología representa el futuro de la gestión financiera. Las empresas buscan cada vez más profesionales capaces de traducir datos complejos en insights accionables que impulsen el valor del negocio.